A 44 años de la nacionalización del cobre, Chile

El aniversario 44 de la nacionalización del cobre nos traslada hacia el recuerdo de un hito que marcó el curso de nuestra economía y que destaca como un pilar del presente y del futuro de Chile.
Desde el inicio del siglo XX, Chile había visto cómo el cobre se convertía en un metal de valor creciente mientras los principales yacimientos cupríferos eran explotados por capitales norteamericanos. La lucha por conseguir el dominio y la propiedad de una industria en manos de capitales extranjeros duraría décadas.
La recuperación del cobre para el país fue un proceso arduo y pudo generar cierta conformidad cuando en 1966, bajo el gobierno de Eduardo Frei Montalva, se decretó la chilenización del metal rojo a través de un modelo intermedio, en el que nuestro país conseguía el 51% del control de la producción.
Pero el anhelo de que esa riqueza fuera por completo para Chile se concretó durante el gobierno del Presidente Salvador Allende Gossens, con la Ley número 17.450. Así, la convicción de nuestras autoridades encontró camino por la vía legal para que el 11 de julio de 1971, el Congreso aprobara como acto soberano que los países tienen derecho a nacionalizar sus riquezas básicas, el argumento que enarboló el gobierno como eje de este logro.
La historia de nuestra minería ha logrado un crecimiento exponencial desde entonces. Hay cifras que explican de manera contundente la envergadura esta evolución y que consagran a Chile como un país minero. Tenemos el 32% de la producción mundial de Cobre y aproximadamente un 30% de sus reservas�� La minería representa más de un 60% del total de las exportaciones chilenas al mundo.
Con el mismo espíritu que tuvieron nuestras autoridades hace 44 años, el Gobierno busca el permanente crecimiento de esta industria de nivel mundial, tomando su responsabilidad frente a un sector que es uno de los pilares en la economía de Chile.
Fuente: Unidad de Comunicaciones, Ministerio de Minería