La Comisión Federal de Electricidad (CFE) ha intensificado su ritmo de anuncios sobre proyectos energéticos en los últimos meses, estableciendo asociaciones y realizando inversiones significativas. La más reciente implica una colaboración con Grupo Carso para la construcción de un gasoducto en el noroeste del país. Este impulso en proyectos está alineado con la promoción de la inversión pública por parte del Gobierno Federal, aprovechando el año electoral que se avecina.
La asociación con Gasoducto Centauro del Norte, subsidiaria de Grupo Carso, se centra en el desarrollo de un ducto de 416 kilómetros para transportar gas natural y generar electricidad en Sonora y Baja California. Paralelamente, la CFE ha asegurado contratos importantes, como el suministro de gas natural a ArcelorMittal por 10 años y un acuerdo con Starlink, empresa de Elon Musk, para servicios de internet.
Otro proyecto destacado es el ducto marino que conectará las regiones costeras de Veracruz y Tabasco, valuado en 4.500 millones de dólares, realizado en asociación con TC Energy. Este impulso contrasta con la actitud inicial de la CFE y el Gobierno, que buscaban renegociar contratos y limitar asociaciones con el sector privado.
Este aumento en la inversión pública, combinado con acuerdos con empresas privadas, ha contribuido al crecimiento económico del país. Analistas señalan que estas condiciones podrían favorecer al oficialismo en las elecciones presidenciales del próximo año. La CFE, al liderar proyectos de infraestructura, busca abordar desafíos energéticos y respaldar el desarrollo económico en diversas regiones.
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