Cobre Panamá, 11 años haciendo minería sostenible
La empresa minera ha invertido más de US$136 millones en programas ambientales y sociales.
Como parte de los compromisos adquiridos por Cobre Panamá en su Estudio de Impacto Ambiental categoría III, que incluyen aspectos ambientales, sociales, de salud y seguridad, y desde antes del inicio de operaciones, la empresa viene realizando acciones planificadas para proteger el ambiente y su biodiversidad. Igualmente, cuenta con una serie de programas para contribuir con el desarrollo económico y social de las 22 comunidades de las provincias de Colón y Coclé, que son parte de su área de influencia directa.
Alejandro Chambi, gerente del Departamento de Ambiente de Cobre Panamá, explicó que la gestión ambiental de la primera mina de clase mundial del país nace más de dos años antes de que comenzara la construcción del proyecto y su implementación se da a partir de la aprobación, por parte del gobierno panameño, del Estudio de Impacto Ambiental (EIA) categoría III el 28 de diciembre de 2011. Este EIA es uno de los más completos del país y consta de 371 compromisos, de los cuales 265 son ambientales.
Por más de una década, Cobre Panamá ha venido implementando un intenso y amplio Plan de Acción de la Biodiversidad (PAB) aprobado como parte del EIA, que contempla compromisos de mitigación y compensación, del cual se derivan programas que abarcan la protección, conservación, manejo e investigación científica de especies de importancia de flora y fauna a nivel nacional.
“La supervisión del cumplimiento de nuestros compromisos ambientales es crucial”, señaló Chambi, quien además indicó que “cada año, consultores externos avalados por el Ministerio de Ambiente realizan dos inspecciones de seguimiento ambiental en las diferentes áreas que conforman Cobre Panamá y los informes producto de estas inspecciones se entregan al Ministerio de Ambiente y a otras instituciones.” “Durante la etapa de construcción se realizaron 32 de estas inspecciones y en la etapa de operación se han realizado 6, la última de las cuales culminó en septiembre de 2022”, agregó.
Al menos una vez cada año los ministerios de Ambiente, Comercio e Industrias, Cultura, el Ministerio de Salud y la Autoridad Marítima de Panamá fiscalizan la gestión de Cobre Panamá para verificar la implementación de las medidas de mitigación de la empresa minera, su sistema de gestión ambiental de acuerdo con el Plan de Manejo Ambiental (PAMA) aprobado y las mejores prácticas operacionales implementadas.
Además, se revisa el cumplimiento del compromiso que tiene Cobre Panamá de reforestar 10,475 hectáreas. A la fecha, la empresa ha sembrado más de 4,200 hectáreas a nivel nacional.
Este año se renovó una carta de entendimiento entre Cobre Panamá y el Ministerio de Ambiente con lo cual la empresa minera continúa dando apoyo financiero a las acciones de conservación de la diversidad biológica y el fortalecimiento a largo plazo de la conectividad del Corredor Biológico, aportando recursos para el mejoramiento y/o implementación de infraestructuras en los parques nacionales Omar Torrijos, Santa Fe Donoso, con un aporte anual de US$ 300 mil, US$ 800 mil y 1-2 millones, respectivamente.
En Cobre Panamá el desarrollo comunitario se trabaja basado en 5 pilares: educación, infraestructura comunitaria, salud y bienestar, desarrollo socioeconómico y relaciones comunitarias.
La empresa minera apoya a diversas organizaciones para el desarrollo y crecimiento de las 22 comunidades vecinas, como Nutre Hogar para el desarrollo de la primera infancia; COSPAE que administra el programa de becas Cobre Panamá Crece Contigo, que ha entregado a la fecha unas 3,800 becas; y FUDIS con quienes se ha llevado a cabo los programas de escuelas integrales en 70 centros escolares y otros proyectos que promueven el emprendimiento y desarrollo sostenible de esas comunidades.
El impacto socioeconómico que promueve la mina también se refleja en la formación de cooperativas para la producción y comercialización de productos que con cultivados por emprendedores y micro emprendedores de las comunidades. Un ejemplo de ello es la Asociación de Productores de Donoso y La Pintada -DONLAP- que actualmente distribuye sus productos a los mercados locales y es uno de los principales proveedores de frutas y verduras para la alimentación de los más de 7,300 trabajadores mineros.
Cobre Panamá mantiene su compromiso de seguir protegiendo y conservando la biodiversidad, generando nuevas fuentes de empleo, apoyando la educación y la salud e impulsando el desarrollo social y económico de sus comunidades vecinas y de todo el país.