Cuatro países controlan el mercado del litio

“La producción de litio se concentra en cuatro países, Australia, Chile, China y Argentina, a los que, en 2021, correspondió más del 96% de la producción mundial”, señala el estudio “Extracción e industrialización del litio: Oportunidades y desafíos para América Latina y el Caribe”, de CEPAL.

Aunque es el país con más reservas en el mundo, con 23 millones de toneladas, Bolivia aún no figura en el escenario de los países productores y exportadores de litio en el mundo. En este momento, ese mercado esta dominado por cuatro países: Australia, China, Chile y Argentina.

“La producción de litio se concentra en cuatro países, Australia, Chile, China y Argentina, a los que, en 2021, correspondió más del 96% de la producción mundial”, señala el estudio “Extracción e industrialización del litio: Oportunidades y desafíos para América Latina y el Caribe”, de CEPAL.

Este documento explica que Australia tiene más del 52% de la producción, es decir es la gran potencia. En este estudio, Bolivia figura como uno de los países que más “recursos de litio” tiene en el mundo, pero nada más.

La participación relativa de cada país en la producción mundial ha cambiado a través de los años. Durante la década de 2000, Chile tuvo una participación promedio del 40% en la producción mundial, mientras que la de Australia se mantuvo en torno al 23%.

En esa década aparecieron China y Argentina, cuyas participaciones, en promedio, se ubicaron entre 15% y el 9%, respectivamente, señala la CEPAL.

En la década de 2010, justo cuando la demanda comenzó a dispararse en el mercado mundial y los precios comenzaron a subir, el liderazgo cambio y la participación de Chile cayó al 31%, mientras que la de Australia aumento al 44%. Ya para 2015 y 2021, la brecha entre los dos países se amplió y en 2018 los máximos alcanzados fueron del 60,2% para Australia y 19% para Chile, según el estudio de esta entidad.

En la región, la tendencia estuvo marcada por el desempeño de la Argentina y Chile. Entre 2000 y 2008, la participación regional en la producción mundial de litio fue superior al 50%, con un máximo del 57% en 2005. En 2016, América Latina y el Caribe volvieron a contribuir con más de la mitad de la producción mundial, por el incremento registrado en la Argentina tras la puesta en marcha de Salar de Olaroz, la segunda operación en ese país. No obstante, esta situación no perduró, porque en 2017 se dio el mayor aumento en la capacidad de Australia que, actualmente, controla el mercado en el mundo entero.

Hasta aquí, Bolivia no figura en el mapa mundial del litio, pero tampoco las reservas que tiene, las más grandes del mundo, le garantizan un fácil o cómodo ingreso a este mercado, pues los países que hoy ya dominan el mercado mundial ejecutan grandes proyectos para mejorar su producción y, peor aún, países que, por ahora tampoco figuran como competidores, también alistan proyectos que pronto los convertirán en nuevos productores y ofertantes.

Por ejemplo, en Argentina se encuentra en curso la ampliación de dos explotaciones que ya están en marcha, Minera del Altiplano y Sales de Jujuy, con lo cual se incrementará su actual producción.

En Chile se destacan dos grandes operaciones en el Salar de Atacama con las plantas de Salar del Carmen y La Negra, operada por Albemarle. A partir de estos proyectos, en conjunto, duplicarían su producción desde 2025. Por su parte, el Gobierno creó la Empresa Nacional del Litio (ENL), señala el reporte de la CEPAL.

Brasil, por su lado, puede convertirse en un productor de litio a gran escala en los próximos años, pues cuenta con la operación de Mibra, a cargo de AMG Lithium, con una capacidad de producción de unas 5.000 toneladas de carbonato de litio y con una ampliación en marcha para llegar a las 13.500 toneladas de carbonato de litio.

México puso en marcha el proyecto de Sonora, que aportaría alrededor de 35.000 toneladas por año de litio y el Gobierno creó recientemente Litio para México (LitioMx), su empresa estatal. Fuera de América Latina y el Caribe se identifica un gran número de proyectos en desarrollo.

OFERTA.

En 2021, la oferta mundial de litio alcanzo niveles en torno a las 500.000 toneladas de carbonato de litio y las proyecciones sobre el crecimiento del mercado son diversas. En Bolivia se espera que con la puesta en marcha de una planta industrial el próximo mes, más una planta piloto que esta en operación, se alcance una producción de 15.000 toneladas al año. Su participación podría Cuatro países llegar hasta el 2% del mercado mundial, comparado con las cifras de 2021, y sólo cuando llegue a poner en funcionamiento las plantas de Extracción Directa de Litio (EDL) en 2025, y alcance a producir 100.000 toneladas al año, que es la meta prometida por el Gobierno central, podría entrar entre los 10 principales productores de litio del mundo.

“Los pronósticos sobre la evolución del mercado en los próximos años muestran una gran dispersión. Sin embargo, sobre la base de las carteras de proyectos y los recientes anuncios, hay consenso respecto de que los cuatro principales países productores, Australia, Chile, China y Argentina, tendrán incrementos absolutos en su capacidad de producción en los próximos años”, establece el informe de la CEPAL.

“En términos relativos, sin embargo, es probable que su importancia decaiga. Esto se explica por la creciente contribución de países que en la actualidad no cuentan con una producción particularmente importante de litio, como Canadá, Estados Unidos y Zimbabwe, que elevarían su producción de manera considerable por sobre los niveles actuales”.

El estudio explica que, si bien la región ofrece un panorama prometedor en términos de proyectos, su participación podría caer en términos relativos. Mientras que en 2021 un 37% del litio consumido a nivel mundial salió de América Latina, se espera que esta cifra se ubique en un 32% hacia 2030, cantidad a la cual ya se podría incluir a Bolivia.

Sin embargo, el informe de la CEPAL deja ver que el camino para Bolivia no será sencillo, no solo porque todavía le falta para iniciar un proceso de producción industrial, también por la gran competencia que se tendrá.

El triángulo del litio tiene 56% de los recursos

En uno de sus capítulos, el estudio “Extracción e industrialización del litio: Oportunidades y desafíos para América Latina y el Caribe”, de la CEPAL, señala que el denominado triángulo del litio, conformado por Bolivia, Argentina y Chile, ostentan el 56% de los “recursos de litio”.

Este triángulo se extiende a través del suroeste de Bolivia y el norte de la Argentina y Chile, en los Andes centrales de América del Sur a una altura media de 4.000 metros sobre el nivel del mar. “Esta región se conoce comúnmente como triángulo del litio”, señala la CEPAL.

“En materia de recursos identificados, los países del triángulo del litio cuentan con el 56% del total mundial. Al considerar el resto de los países de América Latina mencionados, la región alcanza casi el 60% de los recursos”. El informe aclara la diferencia entre “recursos” y “reservas”. Por este motivo Bolivia figura solo como país con “recursos” y no entra en la categoría de “reservas”. Además, este trabajo de investigación no considera el potencial de Coipasa y Pastos Grandes, otros dos salares bolivianos.

“Esto se explica por el hecho de que para el cálculo de reservas se tienen en cuenta muchos aspectos relacionados con factores económicos, las condiciones del mercado y el financiamiento, así como con la ingeniería y el método de extracción a utilizar, y las condiciones legales, ambientales y sociales. Es decir que se toman en consideración factores que condicionan la factibilidad de aprovechar el recurso, más allá del conocimiento geológico que se tiene sobre el depósito”.

“Al respecto, la región mantiene una participación importante que alcanza un 52% de las reservas mundiales… El resto de los países, como Bolivia México y el Perú, no cuentan con estimaciones de reservas”, dice CEPAL.

El salar de Coipasa, en el departamento de Oruro, es una de las áreas donde existen concentrados de litio en Bolivia.

Los precios suben y resisten los cambios

Otro de los puntos que llama la atención en el mercado del litio, es el constante y sistemático aumento de precios.

“En el caso del litio, el precio no solo se multiplicó casi nueve veces, sino que no se observa un descenso significativo, como en el de los otros minerales”, dice el informe de la CEPAL.

En los últimos meses, los precios de varios minerales (metales y tierras raras) esenciales para la transición energética suben rápidamente debido a una combinación de factores, como el pronunciado aumento de la demanda.

“En este contexto, el litio ha sido el metal que registro el mayor aumento de precio, resistiendo incluso el descenso experimentado desde abril de 2022”, afirma el estudio realizado por CEPAL.

Bolivia aún no figura en el escenario de producción y exportación.

Fuente: La Razón