El platino se dispara a máximos históricos y enciende alertas en el mercado global
El mercado del platino atraviesa uno de sus momentos más tensos en décadas. El metal precioso superó recientemente la barrera de los 2,300 dólares por onza, alcanzando un máximo histórico impulsado por una combinación de escasez física, tensiones geopolíticas y un repunte sostenido de la demanda industrial.
Este incremento no responde a un solo factor. La oferta global de platino se ha visto seriamente comprometida por interrupciones prolongadas en los principales países productores, particularmente en África austral, donde los problemas operativos, energéticos y laborales han limitado la producción. A ello se suma un entorno internacional marcado por restricciones comerciales y una menor disponibilidad de inventarios en los mercados físicos.
Del lado de la demanda, el platino ha dejado de ser un metal asociado exclusivamente al sector automotriz. Si bien sigue siendo clave para los sistemas de control de emisiones, su papel en tecnologías vinculadas a la transición energética ha cobrado mayor relevancia. Aplicaciones relacionadas con el hidrógeno, la industria química y ciertos procesos de alta precisión han incrementado la presión sobre un mercado que ya operaba con márgenes ajustados.
La escalada de precios también ha sido alimentada por el interés de inversionistas que buscan refugio en activos tangibles frente a la volatilidad económica global. En un contexto de incertidumbre financiera, inflación persistente y expectativas cambiantes sobre las tasas de interés, el platino ha emergido como una alternativa estratégica dentro del complejo de metales preciosos.
Analistas advierten que el actual nivel de precios refleja un desequilibrio estructural más que un movimiento especulativo de corto plazo. La falta de nuevos proyectos de gran escala, junto con los largos tiempos de maduración en minería, limita la capacidad del mercado para responder rápidamente a la creciente demanda.
Si bien algunos especialistas no descartan episodios de corrección, el consenso apunta a que el platino podría mantenerse en niveles elevados mientras persistan las restricciones de suministro. El desempeño reciente del metal confirma su carácter estratégico en una economía global que avanza hacia nuevas tecnologías, pero que aún depende de cadenas de valor frágiles y altamente concentradas.
El récord alcanzado por el platino no solo redefine su posición dentro del mercado de metales, sino que también plantea nuevos desafíos para industrias que dependen de su disponibilidad, en un escenario donde la seguridad del suministro se ha convertido en un factor clave.