El repunte minero colombiano comienza a atraer inversión
Los altos precios tienen en un buen momento al sector minero. Oro, carbón, esmeraldas y cobre las grandes apuestas. Multinacionales como Newcrest, Newmont y Agnicomines empiezan a mirar opciones de inversión en el país.
La actual tasa de cambio, la eliminación de un turno laboral en China y el aumento en la producción le imprimieron un nuevo aire al sector minero del país en los últimos meses. No se puede hablar de bonanza, pero sí de un buen momento en algunos minerales, justo cuando otros sectores clave de la economía aflojan, como comercio e infraestructura.
El año pasado fue particularmente bueno para las materias primas en el mundo, pues sus precios se vieron incrementados en 26%, en buena medida porque el precio del barril de crudo se recuperó 44%, seguido de 34% de los metales. En el plano local, la minería fue el segundo sector con más crecimiento en 2016, con 4,7%, y muy cerca del primero, que fue establecimientos financieros, con 5%.
En el caso específico del carbón, la presidente de la Agencia Nacional Minera (ANM), Silvana Beatriz Habib Daza, explicó que “para el sector minero en Colombia 2016 terminó de manera inversa a como comenzó”. La funcionaria dijo que el inicio del año fue difícil en cuanto a precios, pero finalizó con un repunte importante, sobre todo en carbón, el cual superó los US$89 por tonelada. En cuanto a producción, Habib explica que el país terminó el año con una cifra histórica, pasando la barrera de los 90 millones de toneladas de carbón, y aumentando la producción de este mineral 5,8% con respecto a 2015.
Llama la atención la recuperación que también presenta la producción de carbón en departamentos distintos a Cesar y Guajira, los dos grandes productores del país. Cundinamarca, Norte de Santander y Boyacá lograron ampliar sus producciones a pesar de las dificultades en transporte y logística.
“También en oro crecimos 4%, en níquel 1%, en esmeraldas 14% y en materiales para la construcción 26%. Luego de esos resultados estamos muy optimistas respecto a 2017, un año en el que se evidenciará la reactivación del sector”, dijo la funcionaria. A pesar de estas buenas cifras, Habib Daza advierte que persisten retos importantes, como la inestabilidad jurídica, la conflictividad social en algunas regiones y la explotación ilícita.
Santiago Ángel, presidente de la Asociación Colombiana de Minería (ACM), ratifica ese buen momento del sector, pero advierte que es necesario resolver los inconvenientes que permanecen, como la demora en la expedición de las licencias ambientales, así como los fallos de las altas cortes que avalan la imposibilidad de hacer minería en algunos municipios.
Ángel dijo que esta situación está haciendo ‘metástasis’ en otras poblaciones y regiones y que se trata de un asunto que debe ser resuelto en el corto plazo para no afectar nuevas inversiones o la llegada de más empresas al país.
Algunas personas en el sector también se han quejado de que la minería haya quedado por fuera de algunos incentivos que estableció la reforma tributaria. En particular, aquel que permite hacer obras a cambio de impuestos; esa medida habría servido para que muchas empresas mineras hicieran inversión social en las zonas donde tienen influencia, que en muchos casos son regiones afectadas por el conflicto y la violencia.
La ANM anunció que durante la feria minera de Toronto (Canadá) celebrada hace unos días, se conoció el interés en el país de tres de las 10 mineras más grandes del planeta. “Nos reunimos entre otras con las empresas productoras de oro Newmont (la segunda en el mundo), Newcrest (la sexta en el mundo) y Agnico Mines (10), todas interesadas en venir e invertir en Colombia”, anticipó Habib.
Esa noticia es buena, pero es necesario hacer ajustes para no espantar a los interesados. “Luego del congreso minero de Toronto queda la percepción de un optimismo moderado en el sector, sobre todo porque las empresas están volviendo a considerar proyectos, pero es necesario poner la casa en orden”, dijo a Dinero el presidente de Mineros, Andrés Restrepo.
Precisamente el oro es una actividad portadora de buenas noticias en el plano local con la aprobación de las licencias ambientales para dos proyectos auríferos a gran escala y dos a mediana escala. “Con estos proyectos se espera incrementar sustancialmente la producción de oro en los próximos años”, dijo la ANM. Se trata de los proyectos Buriticá, de Continental Gold, y Gramalote, de Anglo Gold Ashanti, y de los proyectos auríferos a mediana escala San Ramón, de Red Eagle Mining, y Cisneros, de Antioquia Gold.
¿Precios sostenibles?
La alta volatilidad en los precios de algunos productos lleva a pensar que la fiesta se puede aguar. El Reino Unido –y el efecto posbrexit–, las principales economías europeas enfrentando elecciones en 2017, Trump como presidente y el posible fortalecimiento de la economía americana y la evolución de China son algunos de los hechos geopolíticos a tener en cuenta. Al fin y al cabo, el oro es una inversión refugio muy susceptible a temas como las tasas de interés, rentabilidad de los bonos o cotización del dólar.
Algunos analistas consideran que, en el caso del oro, los precios pueden estar entre US$1.100 y US$1.300 la onza. “Creo en una cifra promedio entre US$1.200 y US$1.250”, dijo Restrepo, de Mineros, quien agregó que tiene en la mira otros negocios de inversión tanto en Colombia como en la Región.
A pesar de las dificultades internas, la minería sigue siendo una locomotora a tener en cuenta en los cálculos económicos para este año. Desde finales de 2016 se nos vendió la idea de que la infraestructura iba a ser el gran jalonador, pero parece que el relevo y la posta vuelven –al menos por el momento– al sector de los minerales.
Fuente: dinero.com