La industria minera mexicana se consolida como destino clave para la inversión extranjera directa, marcando un hito en su atractivo y crecimiento económico.
En un informe reciente de la Secretaría de Economía (SE), se reveló que la inversión extranjera directa (IED) en el sector minero de México ha alcanzado un récord histórico en el primer trimestre de 2024, ascendiendo a 2 mil 373 millones de dólares. Este sobresaliente número representa un incremento del 187% en comparación con el mismo período del año anterior, consolidando al país como un destino atractivo para inversiones en el sector minero.
La mayor parte de esta inversión, 2 mil 173 millones de dólares, se destinó a la extracción de minerales metálicos y no metálicos, lo que demuestra el interés de los inversionistas en la diversidad de recursos minerales que México posee. A su vez, 131 millones de dólares se dirigieron a servicios relacionados con el sector minero, y 68.8 millones se destinaron a la extracción de gas y petróleo.
Este aumento récord en la inversión extranjera directa coincide con un incremento significativo en el precio del oro, que ha alcanzado los 2 mil 400 dólares por onza, lo que impulsó aún más la confianza de los inversionistas en el sector minero mexicano.
A pesar de las preocupaciones iniciales por la implementación de la reforma a la Ley Minera en 2023, which estabeció nuevas regulaciones en la concesión y vigencia de las concesiones mineras en México, la industria minera ha continuado atrayendo inversiones sin precedentes. Hasta el momento, la IED acumulada en el sector minero desde enero de 1999 hasta marzo de 2024 asciende a un total de 48 mil 359 millones de dólares.
Zacatecas se destaca como el estado receptor de la mayor cantidad de inversión extranjera directa en minería, seguido por la Ciudad de México y Sonora. Estos datos reflejan el papel clave que desempeña la minería en la economía de México, generando empleo y contribuyendo al desarrollo de las regiones mineras.
A pesar de los desafíos regulatorios y económicos, la industria minera mexicana demuestra su capacidad para adaptarse y prosperar en un entorno global competitivo. Con un sólido historial de atracción de inversiones extranjeras y un crecimiento constante, el sector minero en México continúa siendo un pilar fundamental en la economía nacional.