Minera Cuzcatlán, comprometida con el respeto a los derechos de las mujeres

Oaxaca. El marco del Día Internacional de la Mujer, la Compañía Minera Cuzcatlán reiteró su compromiso con las mujeres de Oaxaca y del mundo y resaltó la labor que realizan en el mundo laboral.

En el caso de la entidad, la empresa con sede en San José del Progreso, Ocotlán, ha dado oportunidad a muchas mujeres, originarias de la comunidad, principalmente, que en su mayoría empezaron a laborar desde hace más de una década y gracias a su esfuerzo han ido escalando en puestos hasta llegar a niveles de mando.

En ese marco, este día se realizó un encuentro virtual denominado “Mujeres que inspiran, mujeres que trascienden”, en que participaron expertas en el tema y quienes laboran en distintas áreas, como la ingeniera Patricia González, gerente de planta; Fabiola Arango, Cristina Rodríguez y Patricia Arrazola.

Todas ellas compartieron las experiencias que han tenido a lo largo de su actividad laboral, en que han constatado el respeto a su labor, así como el ambiente propicio que hay para su trabajo, y sobre todo el respeto hacia ellas.

“Agradecida por esta oportunidad; contenta de compartir experiencias y aprendizajes, de ser eco para muchas mujeres; es una fortuna estar aquí”, dijo Patricia Arrazola.

Ella es ingeniera industrial y de sistemas y además originaria de San José del Progreso; desde el año 2008 ha trabajado ahí y comenzó en cargos menores, hasta alcanzar puestos altos.

Otra de las destacadas mujeres en la Minera Cuzcatlán es Cristina Rodríguez, quien es ingeniera ambiental, con maestría en calidad y competitividad; actualmente es subdirectora de Responsabilidad Social.

Mientras que Patricia González es ingeniera Químico, originaria de Monterrey y lleva laborando en la empresa por 20 años; inició como ayudante de investigador y hoy es gerente de planta de la Compañía Minera Cuzcatlán.

Entre las ponentes destacó también Fabiola Arango, originaria de San José, licenciada en Administración y labora desde el año 2010 en la empresa y ahora se desempeña en el almacén.

Todas coincidieron en que no requieren un trato especial, pero sí de respeto, de colaboración, de motivación, entre hombres y mujeres, para lograr mejores resultados en la labor y en consecuencia en la sociedad.