Nicaragua apuesta a la minería como factor de su desarrollo

Nicaragua, que acoge el II Congreso Internacional de Minería, busca consolidarse como el país líder de la minería en Centroamérica, y hacer de esa industria uno de sus factores de desarrollo económico.

Nicaragua tiene disponible para concesiones mineras un área total de 71.000 kilómetros cuadrados, poco más que el territorio de Irlanda, según datos de la estatal Agencia de Promoción de Inversiones (ProNicaragua), organizadora, junto a la Cámara Minera de Nicaragua (Caminic) del congreso de dos días en Managua.

Actualmente Nicaragua tiene unos 10.000 kilómetros cuadrados bajo concesión y otros 1.500 kilómetros están en proceso, de acuerdo con las autoridades.

Pero más que terrenos, Nicaragua ofrece posibilidades reales de negocios, ya que en 2015 produjo 274.000 toneladas de oro y otras 586 toneladas de plata, según Caminic.

Las 274.000 toneladas de oro dejaron ingresos por 317,9 millones de dólares o el 3 % del producto interno bruto (PIB), y la minería, que genera cerca de 5.000 empleos formales, atrajo una inversión extranjera por 171,6 millones de dólares, según datos oficiales.

"Nicaragua es el centro de la minería en Centroamérica. Esta actividad genera mucho empleo y dinamiza la economía", apuntó el presidente de Caminic, Sergio Ríos, en la apertura del congreso.

En los últimos 10 años la actividad minera nicaragüense ha atraído casi 700 millones de dólares en inversiones6, destacó el director ejecutivo de ProNicaragua, Javier Chamorro.

El sector empresarial estima que la minería ofrece unos 5.800 empleos directos y cerca de 9.000 plazas indirectas, además de un salario mínimo que casi dobla el promedio nacional (175 dólares).

"La inversión extranjera está marcando el desarrollo de Nicaragua", resaltó por su lado el vicepresidente de la Organización Latinoamericana de Minería, el colombiano Eduardo Chaparro.

Según Chaparro, "la minería, si se hace bien, es una actividad responsable que ofrece desarrollo y crecimiento de la población al Estado y al país".

En este sentido, el presidente del Consejo Superior de la Empresa Privada (Cosep) de Nicaragua, José Adán Aguerri, indicó que para los países vecinos "es importante aprender de la experiencia de Nicaragua".

Aguerri se basó en un estudio reciente de la no gubernamental Fundación para el Desarrollo Económico y Social (Funides) que comparó el desarrollo experimentado en los últimos diez años entre los municipios mineros y los no mineros.

Funides demostró que los municipios mineros de Nicaragua tienen mejores niveles de desarrollo económico, más remuneración y menos pobreza que los que no dependen de las minas.

A pesar de esto, el director ejecutivo de Funides, Juan Sebastián Chamorro, advirtió de que la minería tiene retos socioculturales por cumplir, entre otros, que la población de los municipios mineros no está preparada para cuando los yacimientos se agoten.

Entre los retos están establecer programas sociales para preparar a los habitantes para cuando la mina se agote, la poca diversidad de negocios locales, mayores emprendimientos, reducir el contagio de enfermedades comunes, mejorar las condiciones de los mineros artesanales o "güiriceros", entre otros.

Al congreso asisten unos 270 expertos mineros de Argentina, Australia, Brasil, Chile, Canadá, Costa Rica, Colombia, El Salvador, España, Estados Unidos, Guatemala, Grecia, Honduras, México, Nicaragua, Panamá, Perú, Reino Unido, República Dominicana, Suiza.

El encuentro, cuyo lema es "Minería para todos", cuenta con una rueda de negocios, exposiciones, ponencias, discusiones, y una gira a una zona minera.

El congreso anterior, realizado en 2014, atrajo a más de 300 representantes de empresas mineras de 22 países.

Fuente: lavanguardia.com