El precio del Oro (XAU/USD) se aproxima a máximos históricos tras alcanzar su cierre mensual más alto en noviembre. Los rendimientos de bonos a nivel mundial disminuyen, respaldando la escalada del XAU/USD.
La ralentización de la inflación en EE. UU., Europa y Australia, junto con el crecimiento económico en EE. UU., influye en las expectativas sobre las tasas de interés. Aunque la Fed mantiene su política actual, los datos de empleo en EE. UU. la próxima semana podrían desafiar esta postura.
El oro supera los $2,010, acercándose a máximos históricos, impulsado por la caída de los rendimientos de bonos a nivel global. La desaceleración de la inflación consolida la percepción de que los bancos centrales no subirán tasas pronto.
A pesar del crecimiento económico estadounidense, algunas señales de alarma, como el Libro Beige y las solicitudes de subsidio de desempleo, podrían afectar el optimismo. La Fed se mantiene cautelosa, destacando la incertidumbre.
La atención se centra en los datos de empleo estadounidenses. La evidencia de un mercado laboral equilibrado refuerza la idea de que la Fed ha finalizado las subidas de tasas, impulsando al oro. Sin embargo, datos optimistas podrían fortalecer al dólar, afectando al oro.
La tendencia alcista del XAU/USD se mantiene, apuntando a máximos históricos. Un cierre semanal por debajo de $2,010 podría indicar una consolidación. Soportes clave: $1,975 y $1,930. Resistencias: $2,050, $2,080 y $2,100.
La tendencia alcista es fuerte, pero el riesgo de correcciones intensas aumenta con el precio actual del oro.
El oro busca máximos históricos, impulsado por condiciones financieras relajadas y expectativas de políticas monetarias estables.
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