Peñoles impulsa el cuidado del agua con sus avanzadas plantas tratadoras
En el contexto del Día Mundial del Control de la Calidad del Agua, Industrias Peñoles ha reafirmado su compromiso ambiental a través de iniciativas enfocadas en el uso eficiente y sostenible del agua. Desde sus plantas en La Laguna, la empresa se ha posicionado como pionera en el tratamiento de aguas residuales para su reutilización en procesos industriales y en la mejora de espacios verdes.
Uno de los pilares clave de su gestión hídrica es el convenio establecido con el Ayuntamiento de Torreón, mediante el cual Peñoles toma aguas residuales del sistema de drenaje municipal, las trata y reutiliza en sus operaciones metalúrgicas. Este proceso no solo cubre las necesidades industriales, sino que también permite irrigar áreas verdes en las instalaciones de la empresa y espacios públicos, como camellones y parques de la ciudad.
El director general de Peñoles, Rafael Rebollar, señaló que la empresa está comprometida con la sostenibilidad: “Hemos integrado tecnologías de tratamiento de agua que nos permiten reutilizar este recurso de manera eficiente, lo que refuerza nuestro compromiso con el medio ambiente y la comunidad.”
Con más de 50 años de experiencia en el tratamiento de aguas residuales, Peñoles construyó su primera planta tratadora en 1972 y, desde entonces, ha expandido su capacidad con la incorporación de una segunda planta en 1997 y una tercera en 2018. Actualmente, la planta en Torreón trata un promedio de 160 litros de agua por segundo, destacándose como un referente en la industria.
Por su gestión innovadora del agua, Peñoles ha recibido el distintivo de Empresa Excepcional, otorgado por el Consejo Coordinador Empresarial y el Instituto para el Fomento de la Calidad. Asimismo, la empresa se adhiere a las mejores prácticas internacionales establecidas por el Consejo Internacional de Minería y Metales (ICMM) y al Objetivo de Desarrollo Sostenible 6 de la ONU, que promueve el uso responsable del agua.
Con este esfuerzo, Peñoles no solo garantiza el cumplimiento de los estándares internacionales en materia ambiental, sino que también fortalece su relación con las comunidades en las que opera, contribuyendo a un manejo más responsable de los recursos hídricos en la región de La Laguna.