Industrias Peñoles y Fresnillo plc promueven desde hace más de 20 años la educación entre las comunidades en las que operan, algunas de ellas se encuentran en zonas alejadas de la ciudad.
En ese sentido, ambas compañías mexicanas brindan oportunidades de crecimiento y profesionalización a jóvenes provenientes de regiones en situación de pobreza, marginación y, en ocasiones, de violencia.
En 1993, Peñoles fundó el Centro de Educación Técnica Laguna del Rey (CETLAR), en Coahuila, mientras que en 2011 Fresnillo plc abrió las puertas del Centro de Estudios Técnicos de Fresnillo (CETEF), en Zacatecas. Ambas instituciones están destinados a brindar educación en competencias humanas, técnicas, administrativas, de cultura empresarial y voluntariado, además de contribuir en fortalecer el desarrollo personal y profesional de jóvenes.
Tanto el CETLAR como el CETEF se afiliaron ante la Dirección General de Educación Tecnológica Industrial de la SEP como escuelas particulares incorporadas, lo que otorga a los egresados una certificación que avala sus estudios como técnicos con una formación integral y de excelencia.
Rafael Rebollar, director de Industrias Peñoles, señaló que en el CETLAR, se imparten carreras técnicas como mecánica y electricidad e instrumentación, a jóvenes de comunidades mineras, quienes también reciben apoyo en los gastos de manutención y vivienda.
En ese sentido, Octavio Alvídrez, director de Fresnillo plc, agregó que estos apoyos, también otorgados a los jóvenes pertenecientes al CETEF, tienen como objetivo que los estudiantes dediquen su tiempo completo al fortalecimiento de su formación académica y profesional, y de esta forma, mejorar su calidad de vida.
El programa educativo tiene una duración de año y medio, y está basado en el sistema educativo dual alemán que enfoca 80% en práctica y 20% en teoría. Este modelo está diseñado para estudiantes de alto rendimiento, con un proceso de educación que combina la teoría (aula) y la práctica (empresa) del conocimiento.
Es así que los egresados cuentan con una educación integral que fomenta la ciencia y la tecnología en su formación, aunado a que los alumnos adquieren competencias tanto en el aula como en las instalaciones de las empresas, lo que propicia una ventaja competitiva para desempeñarse de acuerdo con estándares internacionales.
Es importante precisar que desde el inicio de la operación del CETLAR ha permitido que más de 800 egresados se incorporen a la empresa Peñoles. Y es que los estudiantes cuentan con habilidades operativas mineras específicas que suman un valor agregado a la operación diaria de ambas compañías.
Con estas acciones, las mineras mexicanas de Grupo Bal reiteran su total compromiso con el fomento de la educación como herramienta fundamental en el desarrollo del país.
¿Comentarios?
Déjanos tu opinión.