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Una nueva mina de oro, depósito San Ramón, en Santa Rosa de Osos

Pese a la contracción en la exploración, por causas como la baja en el valor de las materias primas y los menores recursos de financiación en el mercado mundial, Colombia

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Pese a la contracción en la exploración, por causas como la baja en el valor de las materias primas y los menores recursos de financiación en el mercado mundial, Colombia se alista para que una nueva iniciativa de oro inicie la fase de producción, después de más de dos décadas de una larga sequía de nuevos proyectos en fase de explotación.
Se trata del proyecto San Ramón, que desde el 2010 adelanta la minera canadiense Red Eagle, cuyas directivas le apuntaron a una mina focalizada, no obstante tener títulos que suman más de 19.000 hectáreas, de las cuales solo ha explorado menos del 20 por ciento.
El gerente en Colombia de la compañía, Rafael Silva, explicó que luego de comprarles en el 2010 los títulos mineros a particulares, procedieron a explorar durante dos años y medio unos 45.000 metros en el subsuelo, para estimar recursos medidos e indicados por 405.000 onzas troy de oro, que equivalen a 12,5 toneladas y que representan aproximadamente el 22 por ciento del oro que se produjo en el país en el 2014 (57 toneladas).
El paso decisivo se dio en marzo, cuando la Corporación Autónoma Regional del Centro de Antioquia (Corantioquia) otorgó la licencia ambiental del proyecto, aval que tiene exigentes condiciones, incluyendo beneficios a las áreas de influencia. Fuentes de la Agencia Nacional de Minería (ANM) señalan que el proyecto es integral y que pese a tener una menor envergadura producirá cerca de la mitad de lo que hoy extraen firmas como Mineros o Gran Colombia Gold.
Proceso complejo
Durante la etapa de exploración, la minera invirtió unos 40 millones de dólares, cifra entre la que se destaca la destinación de más de 7.000 millones de pesos en actividades de educación, capacitación y transferencia de tecnología, no solo en infraestructura y relacionamiento, sino en cultura, educación, ambiental y generación de empleo.
Ahora, la compañía se apresta a invertir otros 80 millones de dólares en la construcción y montaje de la mina, que será subterránea. De esta suma, hace unos meses se anunció la consecución de 60 millones de dólares, quedando pendientes 20 millones de dólares, que estarían listos en las próximas semanas.
El plan es iniciar obras en agosto, con la meta de comenzar producción hacia finales del 2016 o comienzos del 2017, a un ritmo de 50.000 onzas al año (un poco más de una tonelada) durante ocho años.
Tras esto se deberá hacer el cierre de mina, cumpliendo altos estándares de recuperación del terreno intervenido.
Mientras según los voceros del sector minero se superan más de 20 años sin que un proyecto aurífero pudiera pasar de la fase exploratoria, el gerente general de Red Eagle en Colombia, Rafael Silva, sostiene que lo más importante para todo el sector minero es que el proyecto tenga un buen manejo desde los puntos de vista técnico, ambiental y social, con el fin de que sea un ejemplo, ��para que así mismo el país pueda desarrollar más iniciativas mineras, cuyos recursos van a beneficiar vía regalías e impuestos al país��.
Aunque falta finiquitar la consecución del 25 por ciento del dinero que requerirá la construcción y montaje de la mina, la empresa ya tiene contratados a varios proveedores desde hace varios meses, e incluso ya se han realizado algunas compras de algunos equipos en el extranjero, la llegada de los cuales puede tardar entre 8 y 10 meses.
��Hemos empezado a identificar proveedores locales, porque uno de nuestros compromisos en la licencia ambiental es que la mayoría de las compras, mínimo el 60 por ciento de los requerimientos de bienes y servicios, sean de la zona de influencia del municipio��, señala Silva.
La empresa ya inició un plan de visitas a proveedores para que cumplan los estándares requeridos.
Durante la fase de construcción, Red Eagle proyecta generar 120 empleos directos, mientras que en empleos indirectos se habla de una relación de cinco por uno, es decir, unos 600 empleos indirectos.
Y en la fase de producción, es decir, durante un período de 8 años, serían 150 empleos directos, para un impacto en fuerza laboral indirecta entre 500 y 700 puestos de trabajo.
Regalías por US$ 14 millones
Según las proyecciones para la factibilidad de este proyecto minero, con 50.000 onzas de oro al año, en un período de 10 años, la generación de regalías para el país sumaría 40.130 millones de pesos para el país (hoy algo más de 14 millones de dólares) con un precio de oro de 1.300 dólares la onza troy.
Red Eagle recalca que ha sido clara con la comunidad en que luego del cambio en la Ley de Regalías, si el municipio clasifica de la mejor manera, le llegaría aproximadamente un 10 por ciento de manera directa por este concepto.

Fuente: www.eltiempo.com

Leonel Roberto Perea Trejo

Publicado hace 9 años

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