El sector minero en México se fortalece con prácticas ESG para liderar la transición energética
El sector minero en México está tomando un rumbo positivo al reforzar sus prácticas ambientales, sociales y de gobernanza (ESG, por sus siglas en inglés), especialmente en un momento donde la demanda de minerales esenciales para la transición energética está en pleno auge. Las empresas mineras en el país han comenzado a implementar estrategias que no solo cumplen con los principios de sostenibilidad, sino que también buscan dejar una huella positiva tanto en el medio ambiente como en las comunidades que las rodean.
Lejos de verse como una carga, las prácticas de Ambientales, Sociales y de Gobernanza (ESG) están integrándose de manera natural en la cadena de valor de la industria minera. Estas prácticas abarcan desde el manejo responsable de los recursos naturales, la implementación de tecnologías limpias, la protección de la biodiversidad, hasta la transparencia en la toma de decisiones y el respeto a las comunidades locales. Empresas como New Gold y Minera San Xavier están demostrando que es posible cumplir e incluso superar las regulaciones locales, posicionándose a la vanguardia del sector con altos estándares internacionales. “No solo producimos minerales y energía, también contribuimos al desarrollo y crecimiento de nuestras comunidades anfitrionas”, afirma Marisol Barragán, Directora General de New Gold y Minera San Xavier. “La minería no solo genera beneficios económicos para el país; es y seguirá siendo una industria esencial”, agrega, destacando el compromiso de la empresa con la sostenibilidad.
Una de las claves de este éxito ha sido la inversión en tecnología y la implementación de indicadores ambientales que permiten monitorear el impacto de las actividades desde el principio. Los estudios de caracterización son solo el comienzo de una serie de iniciativas que incluyen restauración y remediación ambiental, así como el cierre responsable de los sitios operativos para garantizar su conservación a largo plazo.
Cristina Rodríguez, presidenta de Women in Mining Oaxaca, también destaca el avance de la industria hacia objetivos más claros en temas como la gestión del agua, la biodiversidad, el cambio climático y la relación con las comunidades. “En México, cada vez más empresas están alineándose con estos principios y promoviendo la transparencia y la rendición de cuentas”, comenta. Además, resalta que muchas empresas no solo cumplen con las normativas mexicanas, sino que van más allá, ajustándose a estándares internacionales.
Una de las áreas de mayor avance ha sido la gestión del agua. Las empresas mineras en regiones con alto estrés hídrico están aprovechando cada vez más el uso de aguas tratadas, lo que representa más del 60% del suministro de agua en el sector. Además, las empresas están invirtiendo en energías renovables para reducir su huella de carbono y mejorar su eficiencia energética, contribuyendo significativamente a la sostenibilidad global.
El sector minero en México no solo está marcando la diferencia en términos ambientales, sino también en su compromiso social. Empresas como Orla Mining están colaborando con las comunidades locales para desarrollar proyectos sociales y de reforestación, contribuyendo al bienestar comunitario y al cuidado del medio ambiente. En 2022, las compañías afiliadas a CAMIMEX produjeron 7.2 millones de árboles para reforestación, lo que refleja el impacto positivo que el sector puede tener en la regeneración del entorno natural.
En resumen, las empresas mineras en México están adoptando un enfoque integral hacia el desarrollo sostenible, priorizando tanto la conservación del medio ambiente como el bienestar de las comunidades. Con estrategias claras y compromiso con los principios ESG, la industria minera está preparada para liderar en la transición energética, creando un futuro más verde y próspero para todos.
Fuente: Mexico Business News