El Gobernador de Sonora, Alfonso Durazo Montaño, declaró que ha solicitado a la Secretaria de Economía, Tatiana Clouthier, que se le entreguen al Gobierno de la entidad todas las concesiones mineras que suman más de 10 años inactivas.
Según refirió el mandatario “hay 1,688 concesiones de minas que no están en operación” en Sonora, y si las que superan una década de inactividad pasan a manos del poder estatal, este sería “promotor de la inversión en el ámbito minero”.
En su exposición de motivos también habló de impulsar el sector bajo modelos de responsabilidad social y ambiental, e impulsar la llegada de nuevos capitales.
Sin embargo, cabe considerar que de acuerdo con el artículo 27 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, “corresponde a la Nación el dominio directo de todos los recursos naturales”, dominio inalienable e imprescriptible, que no obstante puede ser concesionado a particulares o sociedades constituidas legalmente.
De acuerdo con la Ley Minera, cuando se cancelan concesiones mineras, se publican los terrenos liberados en el Diario Oficial de la Federación, y posteriormente personas físicas de nacionalidad mexicana pueden solicitar su adquisición. Por otra parte, si una concesión está en regla y cumple con sus obligaciones y derechos, tiene una vigencia de 50 años, con posibilidad de duplicar el plazo.
En días recientes, fueron canceladas 23 concesiones en el país, cuatro de las cuales se ubican en Sonora, y suman una superficie de 11,204 hectáreas en los municipios de Villa Hidalgo, Huachinera y Quiriego.
Fuente: Mundo Minero
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