La industria aeronáutica y la minera son dos de los sectores a seguir de cerca los próximos días, tras el sismo del 19 de septiembre, que ha dejado más de 320 muertos y afectaciones en parte de la infraestructura de la zona centro del país, incluida la capital, la Ciudad de México.
Pese a que todas las operaciones aeronáuticas del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México se suspendieron por tres horas aproximadamente (sin daños importantes identificados), Aeroméxico y Volaris normalizaron sus actividades al día siguiente, reportando 130 y 10 vuelos cancelados, respectivamente.
“Si bien es difícil valorar ahora el efecto a corto plazo para nuestra muestra de Aerolíneas y Aeropuertos, estimamos que el impacto más significativo provendría de la desaceleración temporal del tráfico interno, pero éste se recuperaría en los siguientes meses. En consecuencia, no observamos un efecto considerable en las valuaciones de la muestra”, explicó GBM, a través de un análisis.
El otro sector
En la parte de minería, aunque Zacatecas, Sonora, Chihuahua y Durango, principales centros mineros de México no sufrieron daños, en la Ciudad de México, Puebla, Oaxaca, Hidalgo y Guerrero existe una pequeña concentración de las operaciones mineras, detalló GBM.
“Por el momento, las compañías no han hecho anuncios públicos sobre una posible alteración, lo que significaría que las operaciones se desarrollan normalmente (...) La reconstrucción de los edificios, carreteras, viviendas y puentes dañados podría conformar un impulsor para la demanda incremental del acero en el mediano plazo”, informó GBM, en un análisis.
Fuente: eleconomista.com.mx
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