Como parte de los eventos previos al inicio de la Reunión Internacional de Minería (RIM) en Zacatecas, se llevó a cabo una conferencia titulada "Análisis de mitos y realidades de la industria minera". Este evento contó con la participación de destacados representantes de la industria minera, entre ellos Fabiola Murrieta, Marc Dávila, Arnoldo Grajeda y Manuel de Jesús Macías, quienes abordaron temas cruciales para el sector.
Durante la conferencia, se destacó que el sector minero aportó al erario público un total de setenta y dos mil novecientos veintitrés millones de pesos en 2022, desglosados en diversos conceptos fiscales y derechos. Este significativo aporte refleja la relevancia económica de la minería en México.
Uno de los temas centrales fue la visión de una minería sostenible en el siglo XXI, buscando reducir la huella ecológica del sector. Actualmente, la huella minera ocupa menos del 0.1% del territorio nacional, y la industria tiene el desafío de disminuir esta cifra sin afectar la producción para responder a la creciente demanda de minerales esenciales para la descarbonización y la electrificación global.
Se abordó también la importancia de integrar a las comunidades de interés, incluyendo empresas productoras, inversionistas, empleados, comunidades anfitrionas, autoridades públicas y la academia. Este enfoque es fundamental para establecer objetivos claros hacia la sostenibilidad y reducir las emisiones de gases de efecto invernadero.
En cuanto a las emisiones, la minería se ubica en el sexto lugar a nivel nacional. Sin embargo, el sector está comprometido en reducir sus emisiones en un 33% para 2030 y alcanzar la neutralidad de carbono para 2050. Este compromiso incluye la adopción de tecnologías y prácticas más sostenibles.
Otro tema discutido fue el consumo de agua. La minería no es una de las principales consumidoras de agua en México, situándose por detrás de la industria agropecuaria. Se mencionaron esfuerzos significativos para conservar y reutilizar el agua en los procesos mineros, como es el caso de Minera Peñasquito, que recupera el 72% del agua utilizada en su planta de beneficio.
La conferencia también abordó el impacto social de la minería, destacando cómo los proyectos mineros generan empleo y dinamizan las economías locales. Un ejemplo citado fue el de Mazapil, donde la llegada de Minera Peñasquito revitalizó la comunidad, atrayendo a sus habitantes que anteriormente habían emigrado.
Se discutieron los desafíos regulatorios que enfrenta la industria minera, incluyendo la sobrerregulación y la necesidad de cumplir con diversos requisitos ambientales y sociales. La importancia de una regulación equilibrada y la adaptación a las nuevas normativas fue enfatizada como crucial para el desarrollo sostenible del sector.
La conferencia proporcionó una visión integral de los mitos y realidades que rodean a la industria minera, subrayando la importancia de un enfoque sostenible y la colaboración entre todos los actores involucrados para enfrentar los desafíos futuros.
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