Actualmente, 78 mujeres laboran en Peña Colorada, aportando su talento y valor en áreas administrativas y operativas de la mina y la planta peletizadora; su trabajo cotidiano es la mejor muestra de que en la empresa la diversidad e inclusión se viven.
En ese sentido, el año reciente ha representado una serie de hitos importantes para Peña Colorada, respecto a la participación de las mujeres en áreas que se pensaban exclusivas para los varones.
En agosto de 2022, Esmeralda de Santiago se convirtió en la primera mujer sindicalizada en el área de operación de la planta peletizadora: “le estoy echando muchas ganas para que tengan buena imagen de mí, quiero ser el ejemplo para que entren más mujeres”, asegura, consciente de lo que representa ser pionera.
En otro hito, Marisol Martínez, el 25 de septiembre, se convirtió en la primera mujer en ingresar sindicalizada al trabajo de la mina; en voladuras realiza uno de los primeros pasos para la extracción del mineral de hierro: preparar el terreno que se trabaja con explosivos.
Luego, en el mes de noviembre, un camión de acarreo 777 con capacidad de 100 toneladas, pintado de color rosa, ingresó por primera vez a la empresa, como símbolo de los valores de Equidad e inclusión, como un recordatorio de hacia dónde vamos.
El camión es conducido por Adriana Vázquez, contratista de EMD (Exploraciones Mineras del Desierto): se trata de la primera mujer operadora de maquinaria pesada en la mina de Peña Colorada.
Y el 15 de enero de este año, Andrea Alejandres se convirtió en la segunda mujer sindicalizada en formar parte de la operación de mina. “A mi punto de vista, como mujer, es importante dar las gracias por esta oportunidad y que podemos demostrar que sí se puede”, señala motivada.
Además, con la misión de apoyar la estrategia de Diversidad e Inclusión (D&I) de la empresa, a través del impulso de prácticas, metas y objetivos que coadyuven a que todas las personas se sientan bienvenidas y valoradas, Peña Colorada instaló recientemente el Comité de Diversidad e Inclusión.
El comité está integrado por representantes, mujeres y hombres, de las diferentes áreas de la empresa y su rol es fundamental para la implementación de acciones en cada uno de los espacios laborales que representan.
Sus responsabilidades son: apoyar en la misión de crear un entorno donde todas las personas disfruten de un ambiente que promueva la confianza, la diversidad y la inclusión; implementar mejores prácticas para fortalecer la estrategia rectora de la empresa sobre D&I; además de monitorear constantemente los avances de la organización, cuestionando siempre el status quo, generando cambios favorables para el entorno laboral.
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