Las mineras invierten uno 10,400 mdp en exploración de minerales y el gobierno cuenta con un presupuesto limitado de sólo el 10% de ese monto
Los planes para nacionalizar la emergente industria mexicana del litio se basan en expectativas poco realistas y podrían enfrentarse a complejos problemas técnicos, legales y financieros, advirtieron expertos en minería en el portal de la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción.
Plantean que la exclusividad en la explotación del litio que busca el Estado es innecesaria y limitaría la productividad, ya que las mineras invierten unos 10 mil 400 millones de pesos en exploración de minerales y el Gobierno cuenta con presupuesto limitado de sólo el 10 por ciento de ese monto.
La inclusión del litio en el cambio constitucional es innecesaria dado que los minerales son propiedad de la nación y se aprovechan sólo bajo un esquema de concesiones diseñadas a favor del Estado.
La Cámara Minera de México (Camimex) aseguró que el litio que se tiene en México se encuentra en arcillas, lo que obliga a tenerlo a través de procesamiento más tardado y costoso, por lo que se requiere de una curva extensa en el tiempo en materia de exploración y largos procesos de maduración de los proyectos.
Además de inversiones en desarrollo y tecnología para explotar el mineral, ya que por cada mil indicios de exploración, 100 llegan a concretarse, 10 se convierten en proyectos de exploración avanzada y sólo uno llega a una etapa de producción.
Plantea que si bien se ha generado mucha expectativa sobre las posibilidades del litio en México, aún no hay la certeza de que haya este mineral en la cantidad suficiente para ser económicamente rentable.
Con la información conocida por las empresas y el Servicio Meteorológico Mexicano no es posible afirmar que exista un yacimiento en el territorio nacional que sea viable para su producción, no por lo menos con la tecnología actual, subraya la Camimex.
“Por lo que se sabe ahora, desgraciadamente el litio que hay en México posee una concentración de sólo 0.001 por ciento por tonelada, y para llevarlo a un porcentaje de 30, que es lo que se necesita para una batería, la cantidad de energía es grandísima, incosteable. Hoy no hay un proceso comercial en el mundo para esto, por lo que se está lejos de ser potencia en litio”, expuso la cámara.
De acuerdo con Fernando Alanís, expresidente de la Cámara Minera de México, los yacimientos de litio en estados como Sonora y Zacatecas tienen una muy baja concentración del metal, lo que hace complicada su extracción al no existir la tecnología necesaria, y, por ende, “el país está lejos de convertirse en potencia mundial en la extracción del llamado ‘el petróleo del futuro’”.
Agregó que existen tres tipos de yacimientos de litio: los tradicionales de roca, que contienen 5 por ciento de litio por cada tonelada de roca extraída y que se encuentran principalmente en Estados Unidos y Australia.
El segundo tipo son los salares, de donde sale el 74 por ciento de la producción global de litio y se encuentran principalmente en Argentina, Chile y Bolivia, en los que por cada tonelada de mineral extraído, la concentración de litio es de sólo 0.1 por ciento, pero son muy rentables, dado que por medio de un método de evaporación se logra concentrar el litio de una forma rápida y económica, lo que hace que esas tres naciones sean potencias en este mineral.
Por último, mencionó los yacimientos de arcilla, que tienen una concentración de litio de sólo 0.001 por ciento por cada tonelada, y por el momento no hay tecnología en el mundo que permita que este tipo de exploraciones sea rentable, y son de los que hay en México.
Finalmente, apunta que los argumentos contrarios a la nacionalización presentados por expertos de la industria en los últimos meses, incluidas advertencias de que la medida es equivocada, se basan en información deficiente.
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